Marta Sanz no es lo que se dice una chica delicada. Le gusta que se la follen bien duro y que se corran directamente en su garganta sin miramientos. A nosotros nos gusta dar a las chicas lo que quieren y realmente lo que necesitan, así que llamamos a Max Cortés para que le diera una buena dosis de sus famosos productos lácteos y como no también de cada centímetro de su polla de grandes dimensiones. Ella va a disfrutar como una loca y nos va a felicitar por darle todo lo necesario para que se lo pase muy bien.