Sarah Vandella no ha tenido una buena racha últimamente. Ella encontro a su marido follando con su secretaria, Rachel, hace poco tiempo. Le ha estado carcomiendo solo de pensarlo, así que finalmente decidió ir a su oficina y hacer una gran escena, ¡justo lo que se merece! Y tal vez esa zorra adúltera, Rachel, también estará allí, para llevarse la bronca del año. Pero, continuando con la tradición de la mala suerte, termina atrapada en un ascensor con un cámara obsceno y ademas es un empleado tímido. Bueno, si la vida te da limones? Ten sexo de venganza! Además, ¿un rostro cubierto de semen realmente no sera problema para la acusación de Sarah? Ella no tarda en llevarse ese pene joven hasta su garganta y luego deslizarlo hacia su coño bien mojado, y ansiosa por tener ese nuevo juguete es solo una ventaja. Si su marido queria tener algo de diversión extramatrimonial, ¿por qué no podría ella tenerla también?.