Mi patrón me ordenó llevar a su esposa, llamada
Mia Sanz, a casa si quería mantener mi estatus en la empresa y el pedazo de sueldo que me paga, pero esa zorra andaba tan cachonda que me obligó a cogérmela antes de llevarla para la hacienda de mi patrón. Asi mi mujer iba con todo su coño bien ...