No hay dudas al respecto, Cherie Deville tiene un culo fantástico. Cherie es una gran admiradora de su hermoso culo y quiere conmemorarlo con una réplica de tamaño natural para poderla mostrar para que todos la vean cuando visiten su casa. Para crear su obra maestra, contrata a la joven artista Jessy, que tiene la impresión de que simplemente quiere que su retrato esté pintado. Cuando Jessy se pone manos a la obra y se da un golpe de genialidad artística, duda un poco: ¿está Cherie segura de que quiere que le toque el culo con mis manos? Poco sabe él que no hay nada que Cherie amaría más.