Cuando recibo a una candidata nerviosa como Silvia Dellai, trato de calmar sus nervios vendiéndoles las mejores partes del modelaje. Silvia era un poco tímida y temía que a mis clientes no les gustara su cuerpo, pero se puso de buen humor cuando comenzó a desnudarse para la sesión de fotos de la audición. Todas las dudas y temores de Silvia se desvanecieron cuando vio cómo me quedaba boquiabierto al ver sus tetas perfectas y su cuerpo estupendo.