¡Hola, chicos! Soy Sara Kroft, ¿Os acordáis de mí? ;-) Hace un tiempo quise daros la bienvenida a mi mundo de perversiones, y aquí estoy para enseñárosolo de nuevo jejejeje. Veréis, una de las cosas que más me gusta en el mundo es el sexo anal. Sentir una buena polla (o unos dedos, o un dildo) penetrando profundamente en mi culito, sintiendo cómo se abre paso poco a poco, es una sensación que es difícil de igualar. De hecho, ¡Me encanta sentirla todos los días! Así que he vuelto hacer venir a mi novio, que se desvive por ello. ¡Y por supuesto, voy a grabarlo! Podréis ver cómo voy preparando mi ano para la diversión que se avecina, ¡Casi empiezo sin él! Cuando llega, va poco a poco abriéndose paso con sus deditos, hasta que no puede más y decide por fin penetrarme el culo. Y qué os voy contar, ¡Lo disfruté como si fuera la primera vez! Pero todavía quedaba una sorpresita más. Cuando mi novio terminó (Por supuesto, se corrió dentro de mi culo y me regaló un estupendo creampie anal), yo todavía tenía ganas de más. ¡Así que cogí mi rabazo de caballo, lo rellené de leche y me penetré el culo con él hasta descargar toda la leche dentro de mi culo! Diosss, solo así se podía rematar este polvazo. Chicos, no os distraigo más. Aquí lo tenéis completo... ¡Besitos de Sara!
¡Amigos de FAKings, hoy se viene un buen regalo! Estamos seguros de que os va a gustar, y mucho ;-) Quien nos lo trae es una invitada de excepción: Su nombre es Sara Kroft, y es una joven valenciana: rubia, muy guapa, y sobre todo con dos enormes tetas naturales. Sara es una adicta al streaming y los videojuegos, y le encanta marcarse unas partidas de vez en cuando para sus amigos y seguidores. Pero entre partida y partida, cuando su novio llega a casa, hay algo que le gusta más todavía. Y no es otra cosa poner una cámara en la habitación, y esperarlo bien preparada: completamente desnuda y con un plug bien metido en el culo. En cuanto llega, Sara se abalanza sobre su rabo para comérselo como si no hubiera un mañana, con unas gargantas profundas como hacía tiempo que no habíamos visto, seguidas de un buen y largo beso negro. Cuando él está a punto de explotar, no tiene otra que ir directo a ese culo bien redondo y tragón para penetrarlo a placer, empezando una envidiable ronda de sexo anal... Cuando termina, las cosas pasan a la ducha pero la diversión no termina ahí, de hecho queda lo mejor: Un buen lavado de polla (con mucha lengua jejeje) rematada por una estupenda lluvia dorada en la boca de la jovencita Sara, y dejándonos con ganas de ver más de ella y de sus perversiones. ¡Ojalá sea posible!