Desde que hace algún tiempo entre a trabajar en la empresa donde ahora estoy, siempre se me ha metido entre ceja y ceja follarme al hijo de mis jefes. Pero claro, siendo de edad no he querido jamas hacerlo porque no lo veo ético, a ver, soy viciosilla pero tengo mis principios. Por cierto, ji ji ji, que mi nombre es Karina, soy colombiana, piel latina y acento sudamericano, pero... llevo toda mi vida viviendo en Madrid. Sigo con la historia sobre el hijo de mi jefe. El caso es que ayer cumplió los 18 años, así que le he dicho que para celebrarlo nos iremos a algún sitio, que venga bien vestido con traje y que el resto corre de mi cuenta. La cosa es que no saldremos de mi casa, la idea es recibirlo completamente desnuda y con un pastelito y las velas de 18 cumpleaños, directamente tirarlo sobre la cama y cepillarmelo. Mirad mi cuerpo, mirad mi carita de vicio: ¿Creéis que lo conseguiré?